¡Jaramillo en “estado de gracia”! Hasta siete victorias logró el campeón. Y es que hacía bastante tiempo que no presenciábamos una actuación tan demoledora, tan eficaz y profesional de un jinete que no tiene en Venezuela alguien que le haga sombra. Lo que hizo en la última del domingo con ESTOCOLMO es para quitarse el sombrero. Cuando Jaramillo “va de frente”, lo cual no siempre es así, es amargo y no hay nadie que le impida el lucimiento. Ayer Jaramillo iba a por todas. Y lo que hizo con MISS SANTONA, MISTER DESHI y CARONTES es una demostración de virtuosismo y pericia. A MISS SANTONA, yegua rematadora, la hace saltar en la punta y con su pulso característico la fue llevando hasta la meta sin despeinarse. Lo de MISTER DESHI fue para coger palco: saliendo por líneas interiores, nunca se desesperó, y ponga y ponga lo mantuvo hasta la raya. Apoteósico fue lo de CARONTES, robándole la salida a ELEGIDA, de la misma forma en que le robó la salida a AMERICAN WOMAN. Jaramillo sobre CARONTES no dejó mover a nadie y se les vino con sólo puro arreo, del firme, del elegante, el que sólo los buenos jinetes saben brindar. Jaramillo es la salvación de los jugadores, de los pobres, de los desesperados, y también, de quienes todavía procuramos encontrar en el hipismo algún tipo de arte, de belleza y estética. ¡Bravo! Y que faenas como estas vuelvan a repetirse para beneplácito de todo el pueblo hípico de Venezuela. DIXIE EMPEROR, es un caballo al que le gusta La Rinconada, es decir, se transforma en un crack. Ayer lo volvió hacer, llevándose la COPA DE ORO y alistándose para el Simón Bolívar para volver a verse las caras con el raudo WATER JET. Sólo el hipismo en su forma más pura: vale la pena. Este se enloda y pierde frescura cuando aparecen las conducciones dudosas de jinetes que se han dejado comprar por los mafiosos del medio. Cuando hay dinero, y mucho, hay negocio, y éste, por lo general: conduce al crimen. Sanear el hipismo y buscar los consabidos equilibrios sobre supuestos profesionales y éticos es todo un programa para llevar a cabo.
EL JUEGO DE LOS CABALLOS
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