Es absurdo jugar en taquilla, ni siquiera en la banca paralela, donde la mayoría de los centros hípicos condiciona la jugada (1500 fijo) o no permiten jugar a las grandes torres. O jugamos nuestro cuadrito o el pool de cuatro, o una exótica. Así de sencillo. Además, como vamos a aspirar a un buen dividendo si en una carrera corren hasta tres caballos con dividendo mínimo. Fin de mundo, y una vez más, la más flagrante violación al “juego limpio” dentro de la industria hípica. En realidad lo único que nos queda es jugar en los remates, ya que la proporción de lo invertido permite establecer con claridad la ganancia. La rentabilidad en todo caso está en la jugada del remate. Es por ello que nuestra información es de gran utilidad, ya que representa la suma de los factores lógicos que se hacen presentes en cada ejemplar analizado. Sólo dos caballos por carrera, con su respectivo porcentaje, sirven en teoría, para amarrar la carrera. No nos valen, las trampas, ni el dato escondido, ni los imponderables que nadie es capaz de controlar. Nosotros le ofrecemos al público apostador los dos animales más lógicos; los que tienen el mayor chance “objetivo”. Obviamente, no la vamos a ganar todas, pero sí la mayor parte de las veces, un 60%, lo cual es bastante. Y si sabe “jugar caballos” estableciendo prioridades y jugando sólo donde hay que jugar. Pues los resultados aumentan.
"Un caballo mediocre en su tope de condición es capaz de ganar cualquier carrera; un gran caballo, fuera de condición, pierde la carrera más fácil". Julio Ayala eljuegodeloscaballos2009@gmail.com SOLO WASSAP 0414-7305738 PARA SUSCRIPCIONES CONTACTARNOS POR WASSAP
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